1. Introducción a la Importancia de la Inspiración en el Ámbito Laboral
Seguro que en más de una ocasión te habrás encontrado que, a pesar de ir a trabajar y cumplir con tus tareas, alguien te inspira a ralentizar la marcha. O al contrario, volver a ponerse a trabajar con energía inusitada tras una conversación tan intrascendente como la elección del café con leche descafeinado que mejor te sienta. Este es el gran poder con el que cuenta el líder en cualquiera de sus formas, el poder de la inspiración en sus diferentes facetas.
Solemos dar la responsabilidad de inversión motivadora a la organización, a RR. HH., al líder y a cada encargado si hablamos de mandos medios. Ahora bien, si bien nos animamos a esperar algo de ellos, ellos no son los padres. Así que vamos a centrarnos en pensar que podemos – que debemos buscar en el entorno campo de trabajo para que los que lideran hagan en nuestros cerebros “clic”. No pretendo que mi jefe me dé consejos de vida para ser más feliz. Más bien todo lo contrario, que sin tratar de buscar mi felicidad, me inspira a que en el tiempo que no trabajo lo busque o, por lo menos, que me agrade estar en el trabajo. Que sin preguntarme cómo es mi hijo, me inspire a buscar mi equilibrio fuera de casa. Y así con cada tema. Que cuando soy un crack en algo, me anime a no conformarme y a buscar un nivel que me llene; si soy mejorable, que me inspire a dar un paso más.
2. Liderazgo Inspirador: Cualidades y Prácticas Clave
Se trata de esa capacidad que tiene una persona para influir en los demás, no a través del mero acto de mandar, sino a través de la capacidad personal para convencer, para movilizar, para poner en marcha y para inspirar a sus colaboradores. El líder encarna un equipo y este debe transpirar valores, actitudes y una forma específica de hacer las cosas que quedará en la memoria de sus seguidores. Su reto –y el de cualquiera que asuma esta extrema misión– resulta en animar, retar, movilizar (hacia adelante u otra itinerancia) y dar ejemplo también cuando es más complicado hacerlo. Pensé que os resultaría interesante y alentador retomar esos hábitos, que todos poseemos en mayor o menor medida en alguna circunstancia de nuestra vida y que, poco a poco, dejamos en un olvidado rinconcito… ¿Te unes al reto de limpiarlo?
El poder de la inspiración. Porque cada vez más personas abrigan el pensamiento, hoy más común, de que los líderes al frente de organizaciones, sean del tipo que sean, necesitan ser líderes con capacidad inspiradora. De acuerdo con este estudio, tres de las cuatro variables de la base de datos están muy ligadas a la palabra inspiradora, y no las culpes: las personas necesitan que los líderes les inspiren. Pero, ¿cómo conseguirlo? Según este análisis, lo primero es ser auténtico: si quieres inspirar a otros, tienes que ser auténtico y transmitir esa autenticidad a todos. A este liderazgo inspirador le sigue un cambio en el mindset o forma de pensar y ver el trabajo, que delega más, es flexible y vende el éxito.
3. Fomentando un Ambiente de Confianza y Colaboración
Un lugar laboral donde reine la desconfianza, lo más probable es que haya fallos en la comunicación, mal clima laboral, falta de colaboración interna y estos son factores determinantes para que los empleados se sientan desmotivados. Lograr un ambiente de trabajo caracterizado por la confianza y la colaboración no es tarea fácil. Requiere de un liderazgo estrictamente en equipo, tanto del directivo como de los colaboradores. Algunos posibles pasos que puedes tomar son que la confianza la puedes lograr conociendo a tu equipo de trabajo, su estilo de personalidad, reputación, habilidades y valores que maneja; evitando el chisme y motivando al equipo para que trabaje en conjunto y las tareas no parezcan interminables. En la parte de la colaboración, habla con claridad a los miembros de su equipo sobre lo que esperas obtener de cada miembro, brinda ayuda y pone a trabajar a su equipo, reconocimiento a esfuerzos específicos y mantener a su equipo informado. Sin un ambiente de confianza entre tú y tu equipo de trabajo, es difícil que este se amen y complementen naturalmente. Lo que provocará que los mismos primen beneficios personales por encima de los generales. El ambiente creado, contrario a lo anterior, permitirá que cada miembro decida qué acción servirá mejor a los intereses grupales, haciendo así la mayor contribución posible e integrando su esfuerzo con el de los demás. Una mayor colaboración implicará mayores estímulos para cada uno de tus empleados y así el círculo se ampliará creando un ambiente fértil para la autorrealización, lo contrario a la motivación débil entre los empleados.
4. Reconocimiento y Recompensas: Incentivos Efectivos
La estimulación de un trabajador a través del reconocimiento tanto económico como no económico se ha consolidado con el paso del tiempo como una de las estrategias primordiales para mantener una población laboral altamente motivada y vanguardista. Es imposible tener una plantilla de emprendedores y altamente intelectuales si los dueños no son justos al retribuir los logros obtenidos o, vital para la salud, si el equipo no siente aprecio por el trabajo que ha realizado. Así, es fundamental que los empresarios valoren el trabajo en equipo y no individual, ya que cuando se labora en equipo, todos realizan un aporte al resultado final. Es importante recordar que, si no hay valía de cada una de las aportaciones de todas y cada una de las trabajadoras, no será posible lograr la máxima eficacia del grupo.
No hay que olvidar que las percepciones de justicia en las recompensas están asociadas con el compromiso de los empleados hacia la organización. Además, la relación que los trabajadores desarrollan con sus superiores incrementa la intensidad de las metas propuestas. Hay que recordar que en la empresa no solo es aplicable la mítica teoría de las palomitas, sino que en algunos casos, la brevedad del condicionamiento entre la conducta y su recompensa o sanción puede influir drásticamente en el aprendizaje; de este modo, altera el futuro comportamiento de los trabajadores. Por otro lado, los empleados consideran justas e inmerecidas las recompensas otorgadas por el trabajo bien realizado e injustas las recompensas de estos por sus directivos.
5. Comunicación Clara y Eficaz: La Clave para la Inspiración Diaria
Busca siempre dejar claro tus argumentos, exposiciones, instrucciones, etc. Además, asegúrate de que tu comunicación sea profesional, adecuada y respetuosa. Haz preguntas a tu equipo, solicita opiniones e ideas, y abre un espacio para la participación y el intercambio de información. Si lo que deseas es un equipo inspirado, cualificado, comprometido, motivado y con el error justificado, aprende a reconocer el trabajo bien hecho o los logros alcanzados y hazlo de manera sincera y natural. Conocer las debilidades es una oportunidad para crecer, desarrollarte y mejorar. Haz uso de la crítica constructiva, resalta los aspectos positivos y puntualiza los elementos a mejorar. Además de orientar al director en su desarrollo, hace que el individuo se sienta escuchado y valorado.
No pidas a tu equipo más de lo que se puede o se debe dar; la responsabilidad debe tener límites. Los aspectos que puedes delegar, delega, y si incluyes en la tarea a tus más cercanos, hazlo siempre de manera clara, justificada y consensuada con ellos. Recuerda que las prisas, el trabajo excesivo, el riesgo y un gasto energético y emocional desmedido no controlado suelen generar un rendimiento insatisfactorio y un desgaste personal y de grupo. Por otra parte, percibe también que el exceso de control, seguridad, protocolización, represión y desconfianza generan un trabajo discordante, escaso empoderamiento y dependencia de tu línea de mando, y generan igualmente un bajo rendimiento sostenible. Si desde nuestro equipo y, por supuesto, desde nosotros mismos, no perciben que hay una dirección clara, transparente, competente y apoyada con los medios adecuados, lo más probable es que nuestra gente se bloquee o sufra el síndrome del bloqueo.
6. Desarrollo Profesional y Crecimiento Personal: Herramientas para la Motivación Continua
Adaptarse a los cambios y realizarse es una misión de vida, es lo que diferencia a una persona viva de otra que está muerta en vida. Por esta razón, en la medida en que podemos desarrollar competencias emocionales y profesionales, se van ampliando las posibilidades de completar cada área de la rueda de la vida, como un reto y motivación constante. Las personas que aparecen en escena en este encuentro profesional buscan intervenciones efectivas para que las personas y empresas desarrollen sus capacidades. Para ello, disponen de un conjunto de tecnologías y propuestas prácticas que tienen como objetivo aportar ideas innovadoras a esta sociedad del conocimiento, desarrollando una visión práctica e integrada del ser humano en las organizaciones y presentando un conjunto de recursos y actuaciones creativas.
Con este encuentro, se propone una dinámica completa de crecimiento integral en el ámbito personal y profesional: motivación, autoestima, superación, coherencia interna y acción. Todo ello, trabajar la integración de uno mismo para usar toda nuestra energía actual y futura en alcanzar nuestros proyectos y sueños siendo uno mismo. Un conjunto de técnicas y actividades optimizadas para que el profesional pueda aplicar con eficacia y obtener resultados de éxito. Además de métodos para despertar y mantener motivadas a aquellas personas que componen nuestro entorno y equipo de trabajo. Porque es cierto que con equipos motivados, comprometidos e ilusionados, los proyectos llegan a buen término. Por todo ello, entendemos necesario el encuentro y actualización de estos conocimientos con ejercicios, dinámicas y experiencias actualizadas, creativas y prácticas.
7. Resiliencia y Gestión del Estrés: Manteniendo la Inspiración en Momentos Desafiantes
Los cambios en las condiciones de trabajo pueden afectar los niveles de motivación y capacidad de las personas para inspirarse y liderar. Mantenerse constante y confiado enfrentando las presiones propias de los momentos de estrés, sin desmotivar al equipo, es uno de los desafíos esenciales del líder. Para evitar estos efectos, es necesario prever cómo vamos a reaccionar frente a determinados acontecimientos o circunstancias, ya sean individuales o en el equipo, cómo influyen esas reacciones en el trabajo y la motivación, y, por ende, preguntarse qué necesitará el equipo de trabajo de su líder. La postura resiliente del líder frente a situaciones difíciles y su habilidad para comunicársela al equipo puede actuar como un instrumento protector, mitigando los efectos negativos de los estresores. Así, el líder que ayuda a sus colaboradores a fortalecer su resiliencia actúa con un componente preventivo, evitando que las situaciones difíciles afecten el clima y la motivación.
Para trabajar con la resiliencia en el equipo, pueden llevarse a cabo actividades de coaching individuales, para que cada integrante del equipo reflexione sobre los factores que nutren y debilitan su resiliencia. A este trabajo individual puede sumársele un trabajo de equipo, considerando las fortalezas y vulnerabilidades del conjunto. En el caso de ser necesario, puede realizarse un trabajo específico para aumentar aquellas dimensiones del equipo que actuarían como factores protectores. Esto supone un cambio en la aproximación a las situaciones difíciles, ya que muchas veces nos encontramos resolviendo los problemas cuando aparecen, en lugar de preocuparnos por prevenirlos. Los métodos más efectivos derivan de una estrategia planificada que nos permita anticipar y enfrentar los problemas antes de que desemboquen en una situación estresante.